Hoy, 27 de octubre a las 6:45 a.m. de hace 53 años atrás,
ocurrió la experiencia de llegar a este plano dimensional, y así re-iniciar un
Proceso experimental hasta llegar a recordar ¡Quien Soy! Y decidir, en
cualquier instante, ¡Quien Realmente elijo Ser!
En este instante siento gratitud hacia Dios
Padre, al Hijo y al Espíritu Santo; o lo que es lo mismo: Conocimiento,
Experiencia y Ser; o lo que es lo mismo: Lo que da origen, Lo que es
originado y lo que Es; y que para otros, es: superconsciente, consciente
y subconsciente; pero otros, lo llaman: mente, cuerpo y espíritu; y otros, como
los científicos: energía, materia y éter; y aun otros, dicen que es:
pensamiento, palabra y obra; asimismo para describir el “tiempo lineal” lo
denominamos pasado, presente y futuro que lo simbolizamos con el antes (o fue),
el ahora (o es) y el después (o será); y que en relación con el espacio lo
distinguimos como el aquí, allí y el espacio intermedio entre ambos… Y así,
sucesivamente, divagamos en aspectos conceptuales, que quizás nos distraen de
la “Verdad” que al fin de cuentas, Todo es parte de lo mismo, es decir, lo
individual, sin perder su individualidad, es parte del Todo: ¡es UNO!
Cuando leí: “La forma más rápida de dejar de
escondernos es decir la ‘Verdad´. A todos. Todo el tiempo”, existió
un “click” y me recordaron la célebre frase: “la verdad os hará libre”. Pero aun me cuestionaba: ¿Cuál verdad?
Y la respuesta surgió: “todos alcanzamos la verdad para la que
estamos preparados”.
Así, pues, mi “Verdad” es para la cual estoy
preparado, aquí y ahora. Y en ella, he recordado que “la religión te (me) pide que
aprendas de la experiencia de otros”; por el contrario, “la
espiritualidad te (me) apremia a que busques la propia”.
En esa búsqueda, hago re-membranza del camino
recorrido en estos 53 años del tiempo lineal, y comprendo que “la
vergüenza no es virtud, y la culpa no es bondad, y el temor no es honor”.
No obstante, experimenté la vergüenza, sentí culpa y mucho temor. Y ese es el propósito
de toda experiencia. ¿Cómo conocer cuál es nuestra virtud si no experimentas la
vergüenza? ¿Cómo conocer la bondad, la mansedumbre, la generosidad, la
tolerancia sino experimentas la culpa? ¿Cómo conocer el Amor sino experimentas
el temor, el miedo, la rabia, la impotencia, y más?
El experimentar la vergüenza me llevó, a su vez,
experimentar más y más cosas. Creer en propósitos de otros: “los más fuertes y
aptos son los que sobresalen”; “para obtener el resultado, todo se vale y únicamente
los débiles se quejan…”; “así es la vida” y más. Depende desde el punto donde
se quiera observar el resultado. Si es desde la cima de los cargos ocupados,
muchos dirán: “cumplida la premisas: solo lo fuertes y aptos lo logran…”. En
ese trasegar ¿Cuántos fueron presionados, fustigados e incluso vilipendiados? ¿Cuántos
fueron manipulados a través de la culpa y el temor?
Cuando la esencia espiritual te recuerda de dónde
vienes, tanto desde lo transcendental como de lo terrenal, comprendes que nada,
absolutamente nada de este mundo, es nuestro.
He tenido la experiencia de estudiar con seres
brillantes en conocimiento y que no elevaron materialmente; también con quienes
su conocimiento aplicado fue precario y brillan en su ejercicio profesional. Fui
colega de brillantes exponentes profesionales que se quedaron en su desarrollo
y otros menos brillantes que escalaron. ¿Por qué?
No es menester responderme ahora. Lo que sé, por
experiencia propia, es que puedo vivir disfrutando este Proceso de la vida, sin
nada material, sin ningún cargo de jerarquía y mando como también lo puedo
hacer ostentándolo todo. Da igual, nada de este plano nos pertenece pero si con
solo experimentar: Serenidad, Tranquilidad, Paciencia, Confianza, Jubilo,
Bondad, Mansedumbre, Generosidad, Tolerancia, Fe, Honestidad (entendida como
Congruencia) y Mentalidad Abierta, lo cual, en suma, no se puede describir con
palabras, ya esto es un grande anticipo de lo que sí es nuestro. El equilibrio
es ostentar lo que nos hace “Sentir bien”, o sea, el “BienEstar”.
Cuando se cierra la jornada del día y recuerdas a
toda y cada una de las personas con la cual estableciste una relación,
descubres el propósito de dicha relación, descubres que nada es casualidad y
que todo es causalidad, es decir, tiene (y tuvo) una causa y un efecto. Y toda
relación es toda relación, sin excepción alguna y con el poder de Bendecir o lo
contrario.
Me resulta imposible transmitir con palabras el
pensamiento, el sentimiento y la experiencia hasta ahora vivida. Las palabras únicamente
podrán describir a través de sus símbolos lo que sé y hasta se prestan a
confusión por que será interpretada según la creencia de cada quién. Lo único que
sé es que en mi experiencia y sentimiento representa lo que efectiva e intuitivamente
sabía desde tiempos inmemoriales, desde lo eterno.
Lo anterior lo experimento porque hay algo en mi
interior que me inspira a recordar que “El Pensamiento más Elevado es siempre
aquel que encierra alegría. Las Palabras más Clara son aquellas que encierran
verdad. El Sentimiento más Grandioso es el llamado Amor. Alegría, verdad y
Amor, aunque intercambiables, cada uno lleva a los otros sin importar en qué
orden se encuentren”. Y que cuando se dan estas condiciones es
porque el mensaje viene de Dios.
Hoy me siento bendecido por Dios, el Dios en
nosotros, en cada uno de sus Hijos. Por eso sé que mi trabajo en este plano es
compartir la experiencia con Dios y sí de aplicarlo al campo de las cosas del
mundo se trata, ya llegará la oportunidad donde los “superiores” estén alineados
con estos grandes pensamientos, sentimientos y palabra: Alegría, verdad y amor.
Sé que existen muchos escépticos pero eso es parte del proceso, y toda relación
tiene una causalidad. Sin la existencia de los escépticos no obtendríamos la
oportunidad de experimentar la constancia y perseverancia que en términos espirituales
denomino: la sostenibilidad.
Tengo la completa y absoluta creencia que todos
pero todos, sin excepción, somos Hijos de Dios y tenemos la “chispa divina” del
Amor en nuestros corazones pero sencillamente: la vergüenza, la culpa y el miedo,
nos ha hecho creer que tenemos que defendernos, y al hacerlo, atacamos con la
convicción que el “Poder” es la fuerza, cuando realmente el Poder es el Amor.
Por eso, constantemente repito en mi interior: “en mi indefensión esta mi seguridad” que significa la absoluta
confianza en el Ser Supremo: mi fortaleza. Recuerden: Siempre pero siempre y
más allá de Siempre se puede elegir de nuevo. ¿Qué eliges: Amor o Temor?
Gracias por todas las manifestaciones de cariño vía
las redes sociales, y otros medios de comunicación. Es el reflejo del legado,
de la huella dejada en cada relación: Familiares; amigos de Barrio; Compañeros
de estudio; Colegas y Colaboradores dirigidos: Acuaviva; Casa Color; Centroaguas,
y más; Estudiantes y másJ.
Bendiciones y Gracias por Ser y Estar.
RAMÓN JOSÉ COLLANTE DE LAS SALAS
Coach Holistico
Coach Holistico